Deseo


Deseos, Cupido, Eros
Psique abriendo la puerta al jardín de Cupido, J.W. Waterhouse, 1904

 

 

Los sexos, tanto hombres como mujeres, son sexuados y por ello deseantes y deseados, se buscan y se atraen con más o menos suerte y acierto.

 

Aunque coloquialmente se habla de DESEO, siendo rigurosos tendríamos que referirnos más bien deseos eróticos, pues son pequeños y plurales, referidos a alguien, a algo, erotizados de alguna manera, en algún momento... por tanto, las variables de a quién, qué, cómo, cuándo y dónde en los deseos eróticos son importantes.

Las dificultades en los deseos suelen proceder de estas variables, bien sea por el contraste entre la expectativa y la vivencia o por disonancias entre uno y otro en la pareja.

 

Conocer cómo es la expresión erótica de cada uno y cómo encontrarse en las diferencias y en las semejanzas constituiría el primer paso de intervención.

 

Cuando la expresión de los deseos o la inapetencia en los gestos de intimidad resultan un problema, el asesoramiento sexológico puede ayudar a dar pasos para desbloquear la situación.

 


Banquete de Platón
Andrógino de Platón

 

Para leer más...

El banquete de Platón: somos sexuados, somos incompletos.

Artículo del blog que explica el origen del amor erótico según el filósofo Platón.